Sosteniéndote

Escrito por Leeana Tankersley para MOPS Internacional, traducido para MOPS Latinoamérica.

“Una persona sola puede ser atacada y derrotada, pero dos pueden estar juntos y vencer. Tres son aún mejores, pues una cuerda de tres trenzados no se rompe fácilmente.” Eclesiastés 4:12 NLT

¿Quién se aferra a ti? ¿A quién te aferras tú?

La poeta contemporánea Naomi Shihab Nye escribe sobre dos hermanos que comparten dormitorio en su poema "Supple Cord". A la hora de acostarse, sostienen un cordón entre sus dos camas, tirando de sus respectivos extremos para señalar que aún están despiertos.

Ella escribe:

pero el suave cordón

con sus pequeños extremos deshilachados

nos conectaba

en la oscuridad

Me encanta esta imagen por el consuelo que representa. Una habitación oscura y todo el miedo que acecha a la hora de dormir, y una conexión con un compañero allí en la desorientación. Esto llega al corazón, ¿no es así? Todas tenemos la necesidad humana de estar conectadas, especialmente cuando las amenazas se ciernen sobre nosotras y nos sudan las palmas de las manos y la mente se acelera, lo que ocurre al menos una vez al día si vives en mi sistema nervioso.

Detente y haz una lista mental de las personas con las que puedes contar para sostener el otro extremo de la cuerda por ti..

Tal vez no sean las personas que ves más a menudo o que conoces desde hace más tiempo. Tal vez sea alguien que no habrías asumido fácilmente, alguien que ha sido capaz de sostener realmente el espacio para tu vida y tus complejidades y matices.

Puede que en tu lista sólo haya un nombre. No pasa nada. Pero hazme un favor, ¿quieres? Asegúrate de que haya al menos alguien en tu vida a quien le permitas aguantar cuando tú no puedas, alguien que aguante la esperanza y la fe y la posibilidad y el humor cuando tú te quedes completamente sin nada.

¿Y si no lo hay? Bueno, eso sólo significa que es hora de empezar a buscar e ir primero. Entabla una conversación con una madre a la que admires, planea una reunión en el parque con algunas madres a las que te gustaría conocer mejor, permite que alguien vea tu necesidad durante una fracción de segundo más de lo que te sientes cómoda, comparte una lucha.

Todas y cada una de nosotras necesitamos esto, incluso las que actúan como si no fuera así. Necesitamos conexiones de cuerda, necesitamos sostenedores de gracia, necesitamos saber que no estamos solas, especialmente cuando la oscuridad desciende.

Da un paso en dirección a alguien a quien puedas aferrarte, alguien que pueda aferrarse por ti. Da un paso en dirección a ellas. Un texto. Una hora. Un café. Un abrazo. Di, cuando estés preparada, "Gracias por aguantar, en mi nombre, cuando no tenía fuerzas para aguantar por mí misma. Ha sido realmente importante".

Preguntas:

¿Tienes a alguien que haya aguantado, en tu nombre? ¿Cómo puedes agradecérselo hoy?

¿Cómo puedes convertirte en alguien que resiste en nombre de las demás?